La historia del comienzo
EDUARDO RIAZA
Ediciones Encuentro.
Madrid (2010).
136 pag. 18 €.
Prólogo: FERNANDO SOLS.
El
big bang es, sin duda, uno de los capítulos más conocidos de la ciencia
moderna, y forma parte del imaginario colectivo del hombre del siglo
XXI, casi tanto como la teoría de la evolución. Sin embargo, así como la
figura de Darwin está asociada al evolucionismo, y la compleja teoría
de la relatividad ha hecho de Einstein un héroe popular, la figura de
George Lemaître –precursor de la teoría de la “gran explosión”– es
desconocida para el público general.
Es más, su
nombre es muy poco citado entre los especialistas, a pesar de ser uno de
los grandes astrofísicos del siglo XX, que ha modificado la imagen que
tenemos del universo.Este libro es la primera biografía que se publica
en español de George Lemaître, científico y sacerdote, (de ahí el
ingenioso subtítulo de la obra, –“padre” del big bang–). Y resulta
interesante desde varios puntos de vista. Por un lado nos acerca a un
personaje humano, apasionado por buscar la verdad, a pesar de que tuvo
que sufrir críticas e incomprensiones de otros científicos, tal y como
con frecuencia ha sucedido con los hombres que han hecho aportaciones
muy novedosas o revolucionarias a la ciencia. En esta búsqueda muestra
la confianza del creyente en la perfecta armonía de la revelación de
Dios, que se muestra doblemente a través de la fe y de la ciencia: “La
ciencia es bella, merece ser amada por ella misma, pues es reflejo del
pensamiento creador de Dios”.Y es que en la vida de Lemaître se ve este
afán por hallar la verdad a través de varios caminos. Junto a su
vocación científica (descubierta gracias al estudio en el que empleó los
largos ratos de ocio durante la Primera Guerra Mundial, en la que
participó como suboficial de artillería), se aprecia también la figura
del sacerdote, preocupado por realizar dignamente su ministerio
pastoral. Por otro lado, el autor sabe mostrar de un modo especialmente
entrañable el aspecto docente de esta figura, modelo de “sabio
despistado”, admirado y querido por sus alumnos, y que poseía un modo
nada convencional de enseñar. Al hilo del relato, se pueden revivir
algunos de los momentos más importantes de la ciencia moderna, pues
Lemaître estuvo en contacto con grandes investigadores como Einstein,
Eddington o Hubble. Cabe destacar que el libro explica los principales
conceptos físicos que van surgiendo al hilo de la vida de Lemaître.
Estas explicaciones tienen la virtud de ser muy claras, acompañadas de
numerosos ejemplos, dibujos y gráficos, de modo que pueden ser
entendidos por los profanos en la materia, a la vez que el autor
mantiene el rigor científico.La historia de la teoría del big bang sirve
también para apreciar el modo real en el que la ciencia funciona. Las
polémicas con Einstein y otros científicos, el rechazo inicial de sus
teorías por diversos “prejuicios” son una buena ilustración de lo que el
filósofo Kuhn llamó la «lógica de las revoluciones científicas». Por lo
demás, a lo largo del libro, junto a las cuestiones científicas, surgen
numerosas ocasiones de reflexión filosófica a propósito de los logros y
límites del conocimiento científico.El libro es, como hemos dicho, de
lectura fácil y amena. Dispone además de numerosas fotografías,
insertadas con gran habilidad al hilo de la narración. Es, por tanto,
una obra muy interesante desde el punto de vista docente, muy
recomendable para profesores y educadores que busquen mostrar un ejemplo
de afán por saber y de conectar los distintos ámbitos del conocimiento
humano.
Javier Sánchez-Collado
Volver a bibliografía